En 1946 don Pedro Saro Martínez inmigrante español, junto con otros agricultores de la región, fundaron Bodegas Capellanía en Ramos Arizpe; unas décadas después se convirtieron en la primera bodega de Pedro Domeq en México, la cual estuvo presente por un tiempo en la región.
En el año 2010, las siguientes dos generaciones de la familia Saro, resurgieron las Bodegas Capellanía y plantaron el viñedo en la antigua Hacienda San Juan de Amargos, ubicada en Paredón la cual data de 1750. En el 2013, entre pisados de uva y el esfuerzo de la familia, se pudo embarricar la primera cosecha. Una cosecha que hoy en día es historia.
Las variedades de uva Malbec, Syrah, Merlot, Cabernet Sauvignon y Moscatel producen las joyas del desierto, vinos 100% artesanales, bien equilibrados, con presencia de taninos que aportan buena estructura, agradables al paladar y fácil de tomar.
La inspiración nos llevó a proyectar nuestra triología de etiquetas, como un homenaje a nuestros enemigos eternos; Apis, Corvus y Canis, representan a la Abeja que sorbe la miel de la uva, el Cuervo que hurta la semilla y el Coyote que engulle la uva. Pero aquí, no hay buenos ni malos; como habitantes del desierto todos somos testigos de la historia. Nuestra cepa es de familia y tres generaciones somos una estirpe apasionada por la tierra y sus virtudes. Nuestro objetivo es crear productos capaces de activar la capacidad de asombro ante un vino fascinante.